A FALTA DE IDEAS SE VENDEN ALMAS
La crisis de ideas en el gobierno regional y en los
gobiernos locales ámbito puneño es cada vez más alarmante. Se apela a que no
existen profesionales probos y capaces de llevar a cabo aquello que con mucha
bulla antes en campaña y poca efectividad ahora en la gestión decían harían,
aquello fue una burda mentira. A la fecha lo mismo de siempre, se percibe en el
ambiente ni más ni menos un continuismo de la incapacidad.
Lo penoso de esta permanente crisis de ideas de la cual nuestras autoridades sufren viene
acompañada de una hasta nauseabunda corrupción
que hace que mucha gente calle lo que tiene que reclamar, por un puesto de
trabajo venden sus almas al diablo; bueno, tenemos muchos diablos con cargo de
autoridad.
La pregunta es, ¿dónde están los candidatos de las últimas
elecciones que no lograron ser electos?, infinidad de agrupaciones políticas,
ponchos de color, banderas y bla, bla, bla… lo mismo de siempre. Y como siempre
nos mantenemos como barco a la deriva sin norte ni sur, al final, sin gloria pero si con mucha pena.
Confirmamos que ser autoridad demanda mucho más que
poseer carisma y bla, bla, bla... la falta de formación política y práctica de
valores es tan escasa en nuestras autoridades lo cual se ve reflejada en sus
gestiones poco innovadoras, a este paso no se avizora que no se rompan los esquemas impuestos por
el centralismo limeño y que aun el
centralismo puneño mantiene con relación
a las provincias y estas últimas con relación
a los distritos, la lista sigue…
Sin embargo, apelamos a que en estos dos últimos años de gestión
restantes se pueda mejorar el enfermo innovando proyectos sociales y productivos,
que la crisis de ideas se convierta en oportunidades de mejora
institucional, considerando que no se puede gobernar al pueblo sin el pueblo
mismo.